Osasuna ha llevado a cabo este jueves los últimos preparativos relevantes antes de medirse al Villarreal en la primera de las cinco finales que restan en un cierre de Liga con el reto de Europa al rojo vivo.
Vicente Moreno ha decidido cerrar las puertas del estadio para ultimar aspectos tácticos, jugadas a balón parado y analizar al rival, ejercicios todos ellos con los que tratarán de plantar cara a uno de los equipos que mejor están jugando a este deporte en la actual temporada.
Jon Moncayola ha sido la única ausencia en el entrenamiento y continúa con el proceso de recuperación de su lesión muscular en el bíceps femoral de la pierna derecha. La otra baja para La Cerámica es Alejandro Catena, quien vio la quinta amarilla frente al Sevilla hace una semana.
Han participado en la sesión con el primer equipo los jugadores de Osasuna Promesas Pablo Valencia y Carlos Lumbreras, jugadores que podrían completar la lista ante las ausencias.
Continuar con la defensa de cinco o volver a la de cuatro es la incógnita que revolotea sobre la cabeza de un Moreno reforzado tras la tercera victoria seguido en Liga. La mala racha es cosa del pasado y todas las energías parecen estar puestas en tratar de finalizar el curso en puestos europeos.
Se completará la preparación del encuentro ante el Villarreal con un entrenamiento mañana a puerta abierta en Tajonar, a partir de las 10:30 horas. Con nueve días entre partido y partido, el estado físico del equipo es óptimo.
