Kylian Mbappé y el Paris Saint-Germain, su antiguo club, han sido citados este lunes, 17 de noviembre (13:00 h), ante el Tribunal Laboral de París, en el marco de las disputas legales que mantienen ambas partes por reclamos salariales.
El ahora atacante del Real Madrid mantiene la reclamación legal para que el club francés le abone los 55 millones de euros que, según él, el PSG le debe por impagos de salarios y de algunas primas durante los últimos meses de su estancia en la entidad que preside Nasser Al-Khelaïfi. Además, Mbappé, según informó AFP de fuentes judiciales, solicita la conversión de su contrato de duración determinada en indefinido.
El club parisino y el entorno del delantero merengue han declinado hacer comentarios hasta después de la audiencia, cuya decisión no se conocerá hasta dentro de varios meses, dados los procedimientos habituales del Tribunal Laboral.
"Es simplemente un empleado que se enfrenta a un mal pagador", declaró la abogada de Mbappé, Delphine Verheyden, en una conferencia de prensa en abril, y agregó que su cliente "está asumiendo la responsabilidad de hacer cumplir el acuerdo".
Esta disputa ha envenenado durante mucho tiempo la relación del crack francés con su antiguo club. El delantero fue apartado del primer equipo al inicio de la temporada 2023-24 por el PSG porque quería cumplir su contrato hasta el verano de 2024, descartando cualquier renovación. Mbappé fue finalmente reintegrado al equipo tras la primera jornada de la temporada.
El PSG sostiene que esta reintegración fue el resultado de un acuerdo entre ambas partes que estipulaba que el jugador renunciaría a una parte de las sumas adeudadas al final de su contrato para proteger la salud financiera del club. Una "fantasía", según el entorno de Mbappé.
El capitán de la selección francesa, que finalmente fichó por el Real Madrid en el verano de 2024 tras finalizar su contrato con el PSG sin recibir compensación económica, reclama 55 millones de euros en primas y salarios impagados. Afirma que, según su entorno, nunca existió ningún acuerdo entre él y el club para la condonación de estos pagos.
El PSG, por su parte, califica la reclamación de "inverosímil", haciendo referencia a reuniones que tuvieron lugar en el verano de 2023. El jugador había obtenido en abril una orden judicial para congelar esta cantidad en las cuentas del PSG, pero esta decisión fue posteriormente revocada el 26 de mayo por los tribunales.
La vista de este lunes en el juzgado de lo laboral se celebra cuatro meses después de que el jugador retirara su denuncia por acoso psicológico contra el PSG en julio. A pesar de ello, la investigación que se había abierto seguía en curso este verano.
Las dos partes también litigaron durante mucho tiempo ante los organismos deportivos, LFP y FFF, que se declararon incapaces de hacer cumplir sus decisiones a favor del jugador, debido a una audiencia de orientación en curso solicitada por el club ante el tribunal judicial de París. Este evento, previsto para mayo, se ha pospuesto sin que se haya anunciado una nueva fecha.