0-1. El Atlético Madrileño hace buena su superioridad numérica ante el Alcorcón

El Atlético Madrileño, filial del Atlético de Madrid, mantiene el liderato del Grupo 2 de la Primera RFEF, merced a una trabajada victoria en el Municipal de Santo Domingo, ante un Alcorcón que jugó más de 70 minutos con un jugador menos. Y aún así, aunque el equipo de Fernando Torres tuvo ocasiones de sobra para llevarse una victoria más holgada, se aferró a las grandes actuaciones de Mario de Luis en la recta final para no perder los tres puntos. 

Si el meta colchonero estuvo bien, aún mejor estuvo el local, Gaizka Ayesa, que fue el principal culpable de que el equipo amarillo no encajase algunos goles más, en un partido en el que el Atlético dio un paso más en la brillante temporada que está interpretando.

El primer gran acercamiento del equipo de Fernando Torres era un chutazo desde la frontal, de Arnau Ortiz, que buscaba la escuadra más alejada, al que respondía el meta Ayesa. El arquero se interponía, minutos después, en otro disparo de Ortiz, éste desde dentro del área, tras una gran acción individual de Rayane Belaid.

Eran los mejores momentos del Atlético Madrileño, que sumaba ocasión tras ocasión. La siguiente, un disparo en el área, de Boñar, tras un saque de esquina. Acción en la que Puric caía en el área y el colegiado, a petición de los colchoneros, repasaba un posible penalti, que no concedía porque en las imágenes repetidas, de video asistencia, no quedaba claro qué había sucedido.

El choque se metía en una nueva dimensión, poco después de los 20 minutos, con un pase de Mario de Luis, a la espalda de la defensa alfarera, en el que Jordi Pola agarraba a Miguel Cubo, que ya se iba solo a la portería del cuadro local. Roja y más de 70 minutos por delante para los amarillos, en inferioridad numérica.

El técnico Pablo Álvarez tenía que recomponer a los suyos. Se marchaba Luis Vacas y entraba Iván Pérez, para pasar a un 4-1-4-1, con un Atlético que se volcaba sobre la portería de Gaizka Ayesa.

Boñar rozaba el primero de los rojiblancos, en una acción inmediatamente posterior a la expulsión. Disparo en el área, a media altura, al que el arquero del Alcorcón respondía con unos grandes reflejos.

Nuevo contratiempo para el Alcorcón, que perdía a Raúl Blanco en un forcejeo con Íker Luque. El defensor amarillo agarraba al extremo rojiblanco y se hacía daño en el hombro, cuando el colchonero arrancaba en velocidad. A estas alturas, el campo estaba ya vencido hacia la meta local, con el Atlético intentando hacer efectiva la superioridad numérica. Rayane protagonizaba otra ocasión. El equipo alfarero se mantenía en el partido gracias a su portero.

El Atlético se marchaba al descanso, finalmente, en ventaja. Y ello gracias a un penalti por mano de Iván Pérez, a disparo de Javi Serrano. Tras la revisión pertinente, solicitada casi a la desesperada por el Alcorcón, la pena máxima se ejecutaba porque el central local se había lanzado al suelo con el brazo en alto y el balón había impactado claramente en él, cuando se iba a la portería. Arnau Ortiz marcaba el primero para el Atlético, el sexto de la temporada para él. 

Fernando Torres metía en el campo a Javi Morcillo, tras del descanso por Javi Serrano, porque el capitán colchonero tenía cartulina amarilla. El técnico fuenlabreño no quería perder la superioridad numérica que gozaba.

Precisamente el exjugador del Sabadell era el que protagonizaba la primera gran ocasión de los rojiblancos. Jugada en la que Arnau Ortiz, que dejaba de cara para Morcillo, quien disparaba abajo, pegado al palo, donde Ayesa se sacaba otro paradón. El rechazo le caía al propio Ortiz, cuyo disparo a media vuelta, de nuevo, era conjurado por el meta navarro.

El Alcorcón intentaba estirarse sobre la meta de Mario de Luis, pero el Atlético seguía lanzando contras rápidas. Arnau Ortiz, otra vez, rozaba el segundo, con una buena acción por banda, que terminaba con un recorte hacia el centro y un disparo al palo más alejado. Una acción marca registrada del catalán, que en este caso se iba pegada al palo.

Fernando Torres rotaba jugadores, dentro Koke Mota y Jano por Cubo y Rayane. Y poco después, Sergio Esteban por Íker Luque. Todo cambios ofensivos para sentenciar un partido que estaba con la ventaja tan ajustada como para que el Alcorcón no bajase los brazos y tuviese acciones como la de David Navarro, de primeras tras, pase de Gladys a la espalda colchonera, que Mario de Luis atrapaba.  Pero sobre todo, con un chutazo desde la frontal, por parte de Borja, al que respondía De Luis con una estirada sobresaliente. El meta colchonero mantuvo al Atlético en este tramo final, con varias grandes paradas, también ante un remate de cabeza de Iván Pérez.